Existen muchas dudas sobre el concepto de capilla ardiente, en especial porque siempre hay dudas de lo que es y qué no es. Por este motivo, en el post de hoy vamos a hablar de todo lo que necesitas saber sobre este tipo de capillas para que conozcas mucho más el concepto.

Qué es una capilla ardiente y sus diferencias con un velatorio

Lo que sí que te podemos decir que es un término en desuso y que porque el término que se utiliza hoy en día es el de “velatorio” y sí, ya es básicamente lo mismo.

El resumen rápido es que la capilla ardiente va decorado con elementos luminosos como velas y cosas así. Era algo que se hacía antes cuando los funerales eran más un rito de despedida con sus protocolos y no lo que se realiza ahora, que lo que quieren la familia es que todo pase rápido para poder entrar en su duelo lo antes posible.

¿Qué es una capilla ardiente?

Al hablar de una capilla ardiente estamos hablando de un emplazamiento decorado con ornamentos luminosos donde se va a velar un difunto. Estas son capillas que se suelen instalar en un lugar distinto al tanatorio.

Este tipo de capilla no es un acto en sí, sino que esta se instala y se abre al público. Este tipo de capilla es un emplazamiento y una celebración.

En este tipo de capilla se puede honrar y despedir de forma pública a una persona fallecida, y es muy habitual para los personajes públicos. Es una buena opción para personas relevantes para la sociedad, o si se prevé que exista una gran afluencia de familiares y amigos del fallecido.

Es habitual ver capillas ardientes en polideportivos, centros culturales, o incluso en teatros. Este tipo de capillas no se montan específicamente en edificios religiosos.

¿Por qué se llama capilla ardiente?

Las características principales de las capillas ardientes es que tienen un ornamento lumínico, y por este motivo se llama ardiente. Se refiere a las velas o los cirios que la iluminan y que están junto al difunto, y alrededor del féretro durante el velatorio.

En la antigüedad para este tipo de eventos se utilizaban únicamente capillas o edificios religiosos para velar al difunto antes del funeral. También se realizaba en capillas privadas cuando se trataba de familias de la aristocracia o la burguesía, y posteriormente pasó a realizarse en diferentes sitios. Básicamente las capillas ardientes son un velatorio decorado con ornamentación lumínica.

¿Cuáles han sido las capillas ardientes más populares?

A lo largo del tiempo se han visto algunas capillas ardientes que pertenecen a futbolistas, políticos, humoristas, o famosos. Dentro de las que se han destacado se encuentran las siguientes:

  • José Antonio Reyes: esta fue una capilla ardiente que se instaló durante 5 horas en el estadio Ramón Sánchez Pizjuan del Sevilla FC.
  • Rubalcaba: esta capilla ardiente del político socialista militante del PSEO se instaló en el Congreso, y se decretó un día de luto oficial. La capilla recibió miles de visitas de personas que acudían a honrarle y despedirle.
  • Bimba Bosé: esta capilla es una de las más populares de los últimos años, y esta se instaló en el tanatorio de la Paz.
  • Carme Chacón: ex ministra de defensa, tuvo una capilla ardiente en la sede central del PSOE. Fue una de las capillas de políticos que tuvo más afluencia.
  • Manolo Tena: la capilla del famoso cantante español se instaló en la sede de la SGAE, en el Palacio de Longoria, puesto que el autor formaba parte de la junta directiva. Esta fue muy popular para los fans y admiradores, que lo despidieron con flores, imágenes y velas.
  • David Delfín: fue un diseñador de moda y artista español, cuya capilla ardiente se instaló en el Museo del Traje de Madrid, y fue un lugar repleto de significado al que acudieron muchos familiares, amigos y admiradores.
  • Camilo Sesto: al igual que la capilla de Manolo Tena, su capilla se instaló en la SGAE. Su féretro se instaló junto a un piano de cola y una fotografía del cantante.
  • Chiquito de la Calzada: fue un popular humorista cuya capilla ardiente se instaló en el auditorio Edgar Neville, de la Diputación Provincial. A esta fueron muchos amigos y familiares que acudieron a despedirle, y sobre su féretro tenía una bandera de Málaga.

¿Qué se requiere para montar una capilla ardiente?

El montaje de una capilla ardiente tiene una serie de requisitos como es la preparación del espacio para la familia, los ornamentos luminosos y el montaje del catafalco. Dependiendo del tipo de capilla se necesitarán sillas para la familia y las autoridades, banderas, imágenes del fallecido, ramos y coronas de flores.

Normalmente en la salida de la capilla se colocará un libro de condolencias, en el cual los asistentes dejarán plasmadas unas breves palabras de condolencia. Estas estarán dirigidas a la familia o de recuerdo hacia el finado.

Las capillas ardientes anteriormente solían contar con elementos religiosos, en especial con crucifijos, pero en la actualidad se tiene presente las creencias de la persona fallecida. En caso de que no sean creyentes se deben evitar este tipo de símbolos religiosos en la capilla. 

Instalar una capilla ardiente es una antigua tradición que está en plena vigencia a día de hoy. Sin embargo, en la actualidad los ornamentos luminosos suelen ser luces o bombillas LED que simulan los candelabros o las velas a la perfección, y suelen ser un gran consuelo para familiares y personas cercanas al difunto.

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